Primeras Expectativas

Nos ubicamos en la localidad de Gorina , más precisamente en el hogar espiritual o casa del conocido curador  “Manuel”, que brinda ayuda espiritual a las personas habidas de curarse de algún mal o simplemente con intenciones de encaminar su vida hacia una mejor manera.

Luego de muchas idas y vueltas  nos encontramos con Jorge, un hombre de unos 40 años de edad, con unos lentes oscuros y una pansa que se dejaba observar un muy buen gusto culinario. Amablemente, me acerque al él, contándole que era un estudiante de periodismo en mi primer año y que el fin era un trabajo final para la facultad y que necesitaba saber si no tenía problemas en que yo le realizase una serie de preguntas cortas, como para ganar experiencia en la práctica de ejercer el periodismo.

Al comienzo pude notar cierta duda en Jorge, para decidir si accedía o no a las preguntas de un completo desconocido. Luego cordialmente acepto charlar conmigo este fue el compacto de la entrevista:

-¿Cómo te enteraste de la existencia de Manuel?

 -Bueno me entere por conocidos, que me han dicho que los ayudado, que también conocía gente que les había hecho bien, y bueno sentí curiosidad y aquí estoy para comprobar.

-¿Con que expectativas viniste a visitarlo?

- Primero que nada ver y tener la experiencia ¿no? Y bueno según me dijeron él (Manuel) te brinda ayuda espiritual que es lo que hoy por hoy todos estamos necesitando ¿no? Y bueno con curiosidad y ganas de conocerlo.

- ¿Tenías idea del rumor que habla que ayudo a Juan Sebastián Verón? Aseguran qué esto le hizo ganar una imagen muy positiva y que desde ese momento tomo notoriedad mediática en cierta forma.

-Sisi de eso tenía idea gracias a un famoso libro de su biografía, donde hace mención a él(Manuel) y cuenta que el lugar donde hoy estamos fue donado para seguir ayudando a la gente y aquí estoy para comprobarlo. -Se ríe amigablemente-

Luego de su notable gesto de prestarse a una entrevista, le 

agradezco y lo despido mientras se va adentrando en el 

recinto del famoso curador de Gorina.   

Apaulaz Gonzalo