Según Jorge, todas las
personas son videntes, todas nacieron con un don. Él trabaja con cartas
españolas y también sabe tarot, y un montón de cosas más. Segú él, las cartas
te dan una aproximación más o menos de semanas o meses sobre una situación
pasada, presente y una solución futura.
Sus padres se separan cuando
Jorge tenía siete años, su padre forma otra pareja, con la que esperan un hijo,
varón. Cuando la mujer le comunica a Jorge la llegada de este nuevo niño le
dice que él quedara afuera. Entonces Jorge le señaló la panza y le dijo que de
ella nunca iba a sacar un varón, que ya tenía una nena de un año y ocho meses.
Tuvo siete mujeres más, se le hizo una hernia para fuera y nunca más pudo tener
un embarazo. El único varón, entonces, fue Jorge, el mayor.
Otro ejemplo de las
videncias, es el de Micaela, una nena que hoy tiene once años. Jorge estaba en
una casa, hace once años atrás, tomando unos mates y llega la señora para
mostrarle la ecografía al marido. Tenía tres varones, entonces le tira la
ecografía arriba de la mesa y le dice: ¡Toma!
Entonces le dice:
¿Qué es?
¡Otro varón!
Entonces Jorge le
dice, que le de la ecografía, que iba a hablar con la virgen para que sea nena.
Se llevó la ecografía y la dejó debajo de una virgen. Y así nació Micaela.
Jorge considera que no es el
mejor, porque dice que hay mejores que él. Cuenta que en este rubro hay muchos
templos, muchos parapsicólogos, brujos con un don de nacimiento, con un
don de familia. Él, según cuenta, tiene el don de lengua, tiene el don de saber
de la gente de antemano. Su manera de ser es muy directa y no da vueltas a la
hora de decir algo.
Lo que más le gusta hacer es
estar con sus hijos pero admite que es un padre ausente ya que su trabajo lo
absorbe, le absorbe tiempo y energía, y siempre trata de cubrir esa ausencia
dándoles cosas materiales. Ellos conocen en exactitud lo que Jorge hace. Uno de
ellos, cuenta, que tiene el don y que aun no lo sabe. Y a la vez está seguro de
que cuando se dé cuenta de que lo tiene, será mejor que él en las artes
místicas.
Las 24 horas del día está a
disposición de quien lo necesite, y su familia ya está acostumbrada a los
llamados en la madrugada, aunque confiesa que al principio no era así.
Trabajó durante
catorce años en Santiago del estero, donde se usa mucho la parapsicología
golondrina.
Jorge se maneja con
volantes, hace 6 años que está en La Plata donde alquiló el local en el que hoy
en día atiende. Y en ese momento tuvo una discusión con la mujer del local de
al lado ya que ella también tenía un local de tarot y lo amenazó porque según
ella le iba a robar clientes. Atiende desde las 9 de la mañana hasta las 6 de
la tarde, generalmente dos días a la semana. Las consultas más frecuentes son
por amor, por problemas de pareja, aunque él no cree en el amor y sostiene que
las redes sociales de hoy en día empeoraron las relaciones familiares y de
pareja y que el compañerismo y la confianza son fundamentales para que los
trabajos que él realiza den resultados positivos.
Está convencido que la gente
tiene dos cuerpos: el físico que es el que uno maneja, y el que uno no puede
manejar que es el hetérico, que pertenece al alma.
Jorge es Católico Apostólico
Romano. Fue bautizado en Neuquén y define su recorrido en la vida como una gran
búsqueda espiritual y ubica la fe por delante de todas las religiones.
Florencia Borán
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